La Isla de Pascua

Está situada en el Océano Pacífico, a unos 3.700 km. al oeste de la costa chilena y a 4.050 km. de Tahití, y la conforman tres volcanes extintos. Se ve afectada por periodos de lluvias convectivas, o de carácter frontal, y posee un clima cálido-tropical durante todo el año.
La vegetación nativa consiste especialmente en herbazales y, gracias a contar con tierra fértil y condiciones propicias para la siembra, se cultivan papas, caña de azúcar, raíces de taro, tabaco y frutas tropicales. Toda la superficie de la isla (163 km² aprox.) se encuentra protegida por el Parque Nacional Rapa Nui, gracias a lo cual no solo se protege su ecosistema sino los vestigios arqueológicos dejados por sus habitantes originarios, los rapanui. La principal fuente de agua dulce proviene de la lluvia acumulada en los lagos de los cráteres, siendo el mes más lluvioso mayo.
En 1722, cuando llegaron los primeros europeos, miles de polinesios habitaban la isla, pero a finales del siglo XIX las enfermedades y el tráfico de esclavos habían reducido la población a menos de 200 personas. En la actualidad, la población supera los 5 mil habitantes, de los cuales un 40% pertenece a la cultura rapanui.
La isla cuenta con hermosas playas, ideales para la práctica de deportes acuáticos como nado, surf u buceo. Además, uno de los mejores planes es realizar excursiones a caballo en las que se puede apreciar el imponente paisaje que, en ciertos lugares, está dominado por los enigmáticos moais. Tome en cuenta que el destino cuenta con todas las facilidades, como cajeros automáticos, oficinas de cambio, centros de salud, etc.
